Reiki es una vía fácil de relajación, que te ayuda a medida que la recibes, a estar en paz contigo mismo. El funcionamiento es el siguiente:
a) Primer caso: Sesiones realizadas por un terapeuta
Este caso es el más aconsejado para las personas que están pasando por un momento difícil en sus vidas (ya sea una depresión, ansiedad, o cualquier enfermedad que le comporte un estado de nerviosismo o de inquietud interior).
La función del terapeuta, es la de realizar las sesiones de Reiki y acompañar a su paciente durante ese proceso. El Reiki lo que hace es aportar un estado de paz interior a medida que el cuerpo se va relajando, y ésto comporta la sensación de incertidumbre en los pacientes que nunca han probado el Reiki, ya que normalmente acaban confesando al finalizar la sesión, que normalmente no se relajan con tanta facilidad, y mucho menos llegan a sentirse tan tranquilos.
Estar en paz con nosotros mismo, nos ayuda a salir adelante de cualquier situación difícil, porque nos da fuerza, y nos permite desde ese estado, tener una amplia visión del problema y poder ver claramente como empezar a solucionarlo. He de recalcar que “el Reiki ayuda pero no es algo milagroso”.
b) Segundo caso: Sesiones de “autoreiki”
Para poder hacerse Reiki a uno mismo, previamente la persona ha debido asistir a un curso de reiki, donde el maestro o profesor le habrá enseñado a como hacer Reiki, y la responsabilidad que conlleva hacer Reiki.
Una vez la persona ya ha sido iniciada, ya puede hacerse a sí misma Reiki, que es lo que se denomina el “autoreiki”.
Cuando uno empieza a hacerse “autoreiki”, la sensación de saber que puedes llegar a un estado de relajación fácilmente y que te ayuda a encontrar por unos momentos esa Paz Interior que todos buscamos, es tan placentera,que te sientes feliz y agradecido de tener una herramienta de estas características en tus manos.
c) Tercer caso: Recibir Reiki de una persona que ha hecho el curso previamente
Esta opción normalmente la tienen las personas que a su alrededor conocen a alguien que ha hecho un curso de Reiki, Así que si conoces a alguien a tu alrededor que ya ha hecho como mínimo un primer nivel, y quiere practicar. Te animo que aceptes su invitación, ya que recibir Reiki sea como sea es un gran regalo, sino lo has probado ¡pruébalo y me envías un email!. Hay alumnos que incluso cuando llevan tiempo siguen compartiendo el reiki con sus amigos y familiares, porque hacer Reiki a los demás te ayuda a sentirte muy bien contigo mismo.
Este caso es el más indicado cuando en principio sólo quieres encontrarte más tranquilo y relajado. Si tienes algún problema emocional o físico más fuerte, entonces es mejor que recurras a un terapeuta de Reiki, ya que estará más preparado para ayudarte a solucionar tu problema.Pero sea cual sea la opción que escojas, si recibes Reiki habitualmente, a parte de encontrar esa paz interior, te irás haciendo más consciente de que eres tú mismo quien decide sentirse bien o sentirse mal ante cada situación que se manifiesta en la vida.