Sintonía se define como la adaptación, el entendimiento entre dos o más personas o cosas.
Cuando dos personas están en “sintonía”, nos referimos a que su lenguaje corporal (movimientos, gestos…) y su lenguaje verbal (las palabras) están en concordancia y la comunicación fluye. Para mejorar y tener relaciones interpersonales saludables, la sintonía es fundamental.
- Entra en “modo receptivo”, escuchando y respetando el modo de pensar y la opinión del otro.
- Adapta la misma postura que tu interlocutor: iguala sus movimientos corporales, sus gestos, su manera de sentarse, sus guiños… sin pasarte, hazlo sutilmente.
- Iguala su tono de voz, procura hablar a la misma velocidad y al mismo ritmo.
- Atiende a su respiración, la frecuencia, si respira lenta o rápidamente y su profundidad. Acompásala.
- Cuida las palabras que emites: Evita la palabra “pero” y cámbiala por “y, si…”: “Me parece buena esta idea pero se podría mejorar. Me parece buena esta idea y se podría mejorar”.
- Utiliza las mismas palabras que tu interlocutor para responder o preguntar: “Ayer lo pasé fatal… ¿qué es lo que te hizo pasarlo fatal?”
- Identifica y acompasa con su patrón comunicativo: visual, auditivo, cinestésico. Si desconoces a que me refiero, lee mi siguiente post que publicaré la semana que viene.
Cuando practiques adaptar tu postura a la del otro, al cabo de unos minutos cámbiala, modifícala. Si la otra persona también lo hace y va adoptando tu postura empezará a crearse sintonía.
Al principio te parecerá complicado quedarte con todos estos aspectos, pero si practicas regularmente con uno de estos consejos y poco a poco vas añadiendo los demás irás integrando y aumentando los aspectos de la comunicación en sintonía.
Artículo extraído del blog de vickimuns@vm40coaching.com
Vicky Muns, coach y colaboradora en Escuela Hermes7
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